La presión ocular es la fuerza que mantiene la forma del ojo y ayuda en las funciones oculares, está dada por la diferencia entre la producción y eliminación del humor acuso, ésta varía normalmente entre 10 y 20 mm de Hg.; pacientes con presiones mayores a 21 son pacientes con hipertensión ocular, pero no es necesario tener niveles superiores a 21 para tener daño por glaucoma, y no todos los pacientes con presiones superiores a 21 tienen glaucoma, por esto, este daño aislado no es suficiente para el diagnóstico del glaucoma, pero es un dato muy valioso para el seguimiento de la terapia.
En el glaucoma la presión intraocular puede aumentar ya sea de manera abrupta o de manera crónica (lenta), este aumento de presión provoca el daño del nervio óptico, traduciéndose en una pérdida progresiva de fibras nerviosas y del campo visual periférico; en la mayoría de los casos esta alteración es gradual e indolora por lo que muchos pacientes no la perciben hasta que es permanente e irreversible.
Equipo de presión ocular en niños
Equipo de presión ocular
El nivel de presión al cual el nervio de un paciente es susceptible de dañarse es variable, presentándose en algunas ocasiones presiones inferiores al promedio que producen glaucoma o presiones muy superiores al promedio que no desencadenan daño alguno, por esto el dato de la presión ocular aislado no es suficiente para diagnosticar el glaucoma, pero si es una muy buena herramienta de seguimiento, pues la mayoría de las terapias se basan en llevar la presión a un nivel al cual no produzca daño al nervio óptico.
La tonometría o medida de la presión intraocular, es un dato muy importante pero se debe tener en cuenta que si la decisión de tratar el glaucoma se basa sólo en el aumento de la presión intraocular, algunos pacientes con glaucoma de tensión normal se verán privados del tratamiento que precisan, mientras que otros con hipertensión ocular recibirán un tratamiento innecesario de por vida que les puede ocasionar costos y efectos adversos innecesarios.
El promedio de la población presenta un nivel de presión intraocular que no produce daño entre 10 y 20 mmHg, aunque muchas personas con hipertensión ocular pueden tolerar niveles de presión elevados, si la presión intraocular excede de 27 mmHg conviene iniciar el tratamiento, sobre todo en personas con factores de riesgo asociados.
En los pacientes con glaucoma típicamente se presenta una mayor fluctuación en los valores diarios de presión, los cuales resultan mas nocivo que la misma hipertensión ocular, por esto para un adecuado diagnóstico y tratamiento del glaucoma es obligatoria la medida de la presión ocular durante todo un día para poder tener datos más reales; es claro que un único valor de presión no representa lo que está ocurriendo durante todo un día y mucho menos durante los últimos meses.